Algunos ejemplos de determinantes sociales son el empleo, la seguridad alimentaria, la estabilidad de la vivienda, la educación infantil, la participación cívica, el acceso a la atención sanitaria y los lugares seguros para pasear. Al observar estos ejemplos, se puede ver que no todas las personas tienen las mismas condiciones y que estas condiciones explican en parte por qué algunos estadounidenses están más sanos que otros y por qué los estadounidenses en general no estamos tan sanos como podríamos estarlo.

Los determinantes sociales tienen una gran repercusión en los resultados sanitarios, especialmente para los más vulnerables. En NOAH, no sólo podemos mejorar la salud individual y de la población, sino también ayudar a avanzar en el tratamiento sanitario. Al fin y al cabo, la salud empieza en nuestros hogares, escuelas, lugares de trabajo, barrios y comunidades.