Consejos de seguridad para el sol y el verano - Parte 1
Por Amit Jain, MD FAAP MBA | Pediatra
El verano ya está aquí y muchos de nosotros saldremos con nuestros hijos a disfrutar del sol. El equipo de pediatría de NOAH ofrece algunos consejos de seguridad para disfrutar del sol sin riesgos.
El sol trae muchas cosas buenas, pero también trae la dañina luz UV (ultravioleta). La luz UV puede causar melanoma, una forma mortal de cáncer de piel más frecuente en personas que han sufrido quemaduras solares graves de jóvenes. El sol también puede provocar otros riesgos para la salud y daños en la piel. Aquí tienes algunas precauciones que puedes tomar para protegerte durante todo el verano.
Ropa adecuada y mucha sombra
- Limite el tiempo de exposición al sol entre las 10.00 y las 16.00 horas (la hora de mayor intensidad).
- Haz pausas frecuentes a la sombra si permaneces mucho tiempo al sol.
- La ropa de algodón es la mejor: protege del sol y mantiene baja la humedad para que te mantengas fresco al aire libre. Lo mejor son los tejidos apretados.
- Lleva sombrero: el de ala ancha es el mejor para proteger toda la cara del niño, incluida la nariz, las mejillas, la barbilla, las orejas y la nuca.
Protección UV
- Las gafas de sol para niños deben tener protección UV. No son caras y se venden en todas partes, pero asegúrate de que lleven la etiqueta de protección UV.
- Utiliza un protector solar FPS 15 (o superior) en toda la piel que no esté protegida por la ropa. No olvide las orejas, la nuca, los brazos y las piernas. Aplícalo con cuidado alrededor de los ojos, evitando los párpados.
- Elige un protector solar que indique "Amplio espectro", es decir, que cubra tanto los rayos UVA como los UVB.
- Antes de aplicar el protector solar por primera vez, pruebe una pequeña cantidad en la espalda de su hijo por si se produce una reacción alérgica.
- Aplique el protector solar al menos 30 minutos antes de la exposición al sol, ya que tarda este tiempo en empezar a actuar.
- Vuelva a aplicar el protector solar al menos cada 1 hora.
- Si juega en el agua, vuelva a aplicarse protector solar cada media hora y utilice un protector solar resistente al agua.
Los bebés menores de 6 meses necesitan más protección solar
- Evite la exposición directa al sol. Manténgalos a la sombra con un toldo o bajo un árbol.
- Utiliza sombreros de ala ancha para cubrirles la cara, las orejas y el cuello.
- Viste a los bebés con ropa ligera que les cubra los brazos y las piernas.
- Si un bebé pequeño está al sol, aplíquele pequeñas cantidades de protector solar FPS 15 o superior en la cara, las manos y las piernas.
- No olvide utilizar protección solar incluso en los días nublados, ya que los dañinos rayos UV atraviesan las nubes.
¿Busca más consejos para protegerse del sol en verano? Hable hoy mismo con su pediatra de NOAH.