Gretchen K. Henson, DDS - NOAH Heuser Odontología Pediátrica
"En el ajetreo de la vuelta al cole, la atención dental suele quedar relegada a un segundo plano", afirma el Dr. Henson, quien señala que las enfermedades dentales son las enfermedades crónicas más comunes en la infancia, cinco veces más frecuentes que el asma.
"El cuidado de los dientes es muy importante, pero con las prisas para salir por la puerta por la mañana, el cepillado dental puede quedar relegado a un segundo plano", dice, y añade que el exceso de azúcar y de refrescos y zumos puede provocar una caries dental grave. "Los niños deben ir al dentista dos veces al año, pero un cuidado adecuado en casa, una dieta sana y la prevención pueden garantizar que los dientes de los niños se mantengan sanos cuando vuelvan al colegio", dice la Dra. Henson. En NOAH, educamos a nuestras familias sobre la importancia de una buena salud bucodental en todas las edades y etapas del desarrollo de los dientes. Echa un vistazo a nuestros 11 consejos a continuación y considera la posibilidad de adaptar algunas o todas estas estrategias en tu hogar para que tú también puedas prevenir las enfermedades dentales.
1 - Cepillado estratégico.
Los días de colegio, los niños suelen desayunar y salir por la puerta -a veces incluso desayunan de camino al colegio- y, con las prisas, se olvidan de cepillarse los dientes. La Dra. Henson dice que no es necesario esperar hasta después del desayuno para cepillarse los dientes. Sugiere evitar las prisas matutinas haciendo que los niños se cepillen los dientes antes de desayunar.
"El objetivo es evitar que el PH de la boca descienda a una zona insegura, ya que las caries se forman en un entorno ácido", dice. "Los estudios demuestran que si nos cepillamos y comemos, el PH de la boca no bajará lo suficiente como para formar caries".
2 - Por partida doble.
Antes de ir al colegio, muchos padres pasan mucho tiempo cepillando, trenzando y recogiendo el pelo en coletas. Prueba a darle a tu hijo un cepillo de dientes mientras tú le cepillas el pelo, así podrás hacer las dos tareas a la vez.
3 - Comer bien.
En casa, los niños suelen pasarse el día picoteando. En el colegio, las comidas son más estructuradas pero menos saludables, ya que los almuerzos escolares suelen incluir alimentos muy procesados o con alto contenido en azúcar. Si va a preparar el almuerzo de su hijo, envíe la mayor cantidad posible de alimentos perecederos, es decir, todo lo que "requiera refrigeración", como frutas, verduras y carnes, en lugar de alternativas saludables.
4 - No te preocupes por ser creativo.
Está bien darle a tu hijo el mismo almuerzo saludable todos los días. Los niños no necesitan tanta variedad y hace la vida más fácil cortar y empaquetar frutas y verduras en una bolsita que puedas coger junto con un recipiente de hummus y unas rebanadas de pan de pita.
5 - Si se queda en la estantería, se queda en los dientes.
Incluso los "tentempiés saludables" más omnipresentes -peces de colores, pretzels y galletas saladas con bajo contenido en azúcar- contienen almidón que recubre los dientes y alimenta a las bacterias que pudren los dientes y adoran los carbohidratos. Los colegios tienden a recurrir a estos productos porque pueden guardarse en la despensa. Los profesores también tienden a dar a los niños estos productos como tentempié, por lo que los padres no deben duplicar su consumo. Hay que dar a los niños alimentos integrales, como frutas enteras, en lugar de alimentos envasados o pegajosos como gominolas, rollitos de fruta o frutos secos como las pasas.
6 - La mejor bebida es el agua.
El zumo envasado suele tener más azúcar del que un niño debería tomar en todo un día. Los niños que beben zumo en la comida tendrán los dientes manchados el resto del día, a menos que se limpien bien la boca después de comer, lo cual es poco probable. La mejor bebida es el agua. El agua del grifo en una botella de agua no sólo es respetuosa con el medio ambiente, sino que es mejor que el agua embotellada que no tiene flúor. Deja los zumos para la cena... o mejor aún, dale a tu hijo fruta entera. Los dulces crean adicción, así que enseñe a su hijo a que le guste el agua.
7 - Proteger los dientes.
Asegúrese de que los niños llevan protectores bucales cuando participen en deportes organizados en la escuela, especialmente fútbol, béisbol y baloncesto. No dé por sentado automáticamente que los niños dispondrán de protectores bucales; aparte del fútbol, por lo general son los padres quienes deben iniciarlo.
8 - Los cascos deben ser como los cinturones de seguridad.
Los niños deben llevar siempre casco cuando monten en bicicleta, patinen o utilicen patinetes, incluso si sólo dan una vuelta a la manzana o al vecindario. Enseñe a sus hijos que los cascos son como los cinturones de seguridad, no opcionales.
9 - Si el niño se cae.
Si su hijo sufre una caída de cualquier tipo -ya esté en preescolar o en el instituto- debe acudir inmediatamente a la enfermera del colegio y, a continuación, visitar al dentista. A veces los problemas no aparecen de inmediato, sino que, como un hematoma, se desarrollan con el tiempo. Algo que puede parecer un pequeño defecto cosmético puede afectar en realidad a la raíz de un diente adulto. Por eso es importante llevar al niño al dentista después de una caída, para establecer una línea de base con el tiempo.
10 - Si se cae un diente.
A partir de tercer curso, si a un niño se le cae un diente de delante, puede ser un diente permanente. Si se le cae un diente, debe volver a ponérselo en la boca inmediatamente. No frote el diente aunque esté visiblemente sucio (puede enjuagarlo muy suavemente), pero incluso el agua puede matar las células de la raíz del diente. Hay una diferencia de 30 minutos entre conservar el diente y perderlo, así que asegúrate de volver a ponerlo en la boca en un plazo de cinco a diez minutos.
11 - Los niños y el dolor.
La mayoría de los niños no se quejan del dolor de muelas porque las caries no duelen hasta que se infectan. Los niños que no tienen una buena dentadura -dientes ausentes, descoloridos o dañados- suelen recibir un trato diferente, tanto por parte de sus compañeros como de los profesores. Los estudios han demostrado que es menos probable que los profesores atiendan a los niños con dientes en mal estado, y un niño que tiene dolor debido a dientes infectados no puede concentrarse ni prestar atención.
12 - Tirantes.
Es muy importante que los niños cuiden sus encías cuando llevan ortodoncia. Una buena higiene bucal es aún más importante durante la adolescencia, cuando las hormonas cambian la flora de la boca. Como puede ser difícil cepillarse alrededor de los aparatos, la placa puede acumularse y causar "desmineralización", lo que lleva a daños permanentes en los dientes adultos, como manchas blancas. Imagínese la decepción cuando se quitan los aparatos y aparecen dientes rectos y manchados. Esto se puede prevenir mediante el uso de enjuagues bucales especiales para niños con aparatos de ortodoncia.
Nuestro equipo asistencial de NOAH está aquí para ayudarle a crear y gestionar sus hábitos de vida saludables. ¿Necesita ayuda para establecer o mantener sus objetivos? Solicite una cita o llame al 480-882-4545 hoy mismo.