The Importance of Pediatric Vision Screenings

Growth and development are tracked in many ways throughout every stage of life. Just like weight, height, brain function, and dental health are regularly measured, it’s important to monitor eye health as well. Children don’t have a reference point for “good” or “bad” vision like adults do and rarely feel pain or discomfort from conditions affecting eyesight. That’s why regular vision screenings are so important for young children.

Vision screenings are simple tests performed by a pediatrician or other primary care provider during your child’s routine well-child exams. According to the American Academy of Ophthalmology, eye health should be checked on the following schedule:

Newborn

Your NOAH provider will examine baby’s eyes to check for basic indicators of eye health including:

• red reflex (like seeing red eyes in a flash photograph). If shining a bright light into the eye fails to produce a red reflex, further testing may be needed
• blink and pupil response

An ophthalmologist (a doctor who specializes in eye health) should do a comprehensive exam if the baby is:

• born prematurely
• has signs of eye disease
• or has a family history of childhood eye disease

6 to 36 months

A second check is usually part of a well-child exam between 6 and 12 months and a third screening by 36 months. During these exams your child’s pediatrician or primary care provider will:

• reevaluate red reflex, blink, and pupil response
• visually inspect the eyes
• check for healthy eye alignment and movement

3 to 5 years

Between the ages of 3 and 5, or as soon as they can read an eye chart, children should begin having routine visual acuity testing. This testing determines the sharpness or clarity of eyesight (ie. 20/20). This is also a good time to look for issues like misaligned eyes, lazy eye, refractive errors, or other focusing problems.

5 years and older

By age 5, children should be getting regular vision screenings during their yearly well-child exams. Your provider will conduct a visual acuity test and reevaluate for vision problems or symptoms of eye disease.

If anything from your child’s vision screening is considered abnormal, your provider may recommend further testing (a comprehensive eye exam) with an ophthalmologist. It’s important to diagnose issues as early as possible and begin treatment. Untreated vision problems can worsen over time and affect a child’s development and ability to learn to read and write.

To schedule a well-child exam along with recommended vision screenings, request an appointment online or call 480-882-4545.

La importancia de los exámenes de visión pediátricos

El crecimiento y el desarrollo se rastrean de muchas maneras a lo largo de cada etapa de la vida. Al igual que el peso, la altura, la función cerebral y la salud dental se miden regularmente, también es importante controlar la salud ocular. Los niños no tienen un punto de referencia para la visión “buena” o “mala” como los adultos y rara vez sienten dolor o molestias por afecciones que afectan la vista. Es por eso que los exámenes regulares de la vista son tan importantes para los niños pequeños.

Las pruebas de detección de la visión son pruebas simples realizadas por un pediatra u otro proveedor de atención primaria durante los exámenes de rutina de su hijo. De acuerdo con la Academia Americana de Oftalmología, la salud ocular debe revisarse en el siguiente horario:

Recién nacido

Su proveedor de NOAH examinará los ojos del bebé para verificar si hay indicadores básicos de salud ocular, incluyendo:

• reflejo rojo (como ver ojos rojos en una fotografía flash). Si el brillo de una luz brillante en el ojo no produce un reflejo rojo, es posible que sea necesario realizar más pruebas
• parpadeo y respuesta de la pupila

Un oftalmólogo (un médico especializado en salud ocular) debe hacer un examen exhaustivo si el bebé es:

• nacido prematuramente
• tiene signos de enfermedad ocular
• o tiene antecedentes familiares de enfermedad ocular infantil

de 6 a 36 meses

Un segundo examen suele ser parte de un examen bien infantil de 6 a 12 meses y un tercer examen de detección de 36 meses. Durante estos exámenes, el pediatra o proveedor de atención primaria de su hijo:

• reevaluar la respuesta de reflejos rojos, parpadeos y pupilas
• inspeccionar visualmente los ojos
• comprobar si hay alineación y movimiento ocular saludable

de 3 a 5 años

Entre los 3 y 5 años de edad, o tan pronto como puedan leer una carta ocular, los niños deben comenzar a someterse a pruebas de agudeza visual de rutina. Esta prueba determina la nitidez o claridad de la vista (es decir. 20/20). Este también es un buen momento para buscar problemas como ojos desalineados, ojos perezosos, errores refractivos u otros problemas de enfoque.

5 años o más

A los 5 años, los niños deben someterse a exámenes de visión regulares durante sus exámenes anuales de bienestar infantil. Su proveedor realizará una prueba de agudeza visual y reevaluará los problemas de visión o los síntomas de la enfermedad ocular.

Si algo de la detección de la visión de su hijo se considera anormal, su proveedor puede recomendar más pruebas (un examen ocular completo) con un oftalmólogo. Es importante diagnosticar los problemas lo antes posible y comenzar el tratamiento. Los problemas visuales no tratados pueden empeorar con el tiempo y afectar el desarrollo del niño y su capacidad para aprender a leer y escribir.

Para programar un examen bien infantil junto con las pruebas de visión recomendadas, solicite una cita en línea o llame a 480-882-4545.